«Fingers» crujientes de pavo al estilo Buffalo 

¿Cansado de esos rebozados llenos de hidratos y que no nos interesan para llevar una buena dieta? Yo sí. El pollo rebozado es un plato muy fácil y que te saca de un apuro pero que nos aporta muchos hidratos debido precisamente a ese rebozado que suele estar hecho de pan. Empanados o rebozados hay de muchos tipos pero hoy os voy a enseñar uno que es paleo ya que el rebozado es pura proteína , puesto que se trata de aprovechar la corteza de cerdo. Si, habéis oído  bien, estamos hablando de las típicas cortezas de cerdo pero, ojo las que son de verdad es decir que solamente se compone de piel de cerdo y sal. Este curioso aliado nos dará el punto crujiente para nuestro rebozado. 

Y ya para acabar de arreglarlo ¿por qué no rebozar utilizando una salsa que haga más rica la carne?  Pues ahí entra la salsa búfalo, esta es una salsa típicamente americana que se suele emplear para las alitas de pollo pero, que está compuesta de productos que no nos afectarán a nuestra forma de comer dándole a la carne una untuosidad especial que la hace muy buena. Bueno, pues vamos por esta divertida receta

INGREDIENTES 

  • Filetes de pavo o pollo (en esta ocasión he utilizado pavo pero sale igual de bien con una cosa u otra)
  • dos huevos 
  • dos cucharadas de vinagre de manzana 
  • el zumo de un limón 
  • dos cucharadas de ajo en polvo 
  • dos cucharadas de cebolla en polvo 
  • dos cucharadas de paprika o pimentón dulce
  • media cucharada de pimienta de cayena picante o paprika picante
  •  una cucharada de sal 
  • una bolsa de cortezas de cerdo pero ojo, que sean cortezas de cerdo cuyos ingredientes sean cortezas de cerdo y sal y ya está

PREPARACION 

Comenzaremos cortando el pavo en tiras en forma de dedos » fingers » y lo reservamos. Luego coged un cuenco y cascar los dos huevos y tirarlos dentro, Y luego ir tirando el resto de ingredientes excepto el pavo. Es en este momento cuando tú decides el grado de picante que quieres que tenga, poniendo más o menos cayena picante, si quieres que esté al gusto de todos, mejor que pongas un poquito menos, yo suelo poner media cucharada pero hasta una estaría bien. Cuando ya esté todo dentro del bol bate hasta hacer una salsa uniforme


Y ahora viene una de las partes más divertidas de hacer esta receta, la parte antiestrés. Cogemos la bolsa cortezas de cerdo y podemos hacer dos cosas, o vaciar la mitad en una bolsa de congelados que siempre será más fácil, o utilizar la misma bolsa en la que viene, pero tenemos peligro de que se rompa. Bien pues si habéis decidido la opción de ir metiendo las cortezas en una bolsa de congelados ahora la cerráis y empezáis a darle golpes para machacar las cortezas. Bueno, esto también lo podríamos hacer metiendo las cortezas en la trituradora pero nos obligaría a lavar otro cacharro y además, el pegar golpes y machacar no deja de ser divertido y terapéutico. Una vez tengas las cortezas machacadas, a ser posible sin que quede ningún trocito grande, ponlas en un plato. 

Mientras tanto tenéis que poner el horno a calentar a 200°

Y ahora es el momento de marranear un poco, cogemos cada trozo de pollo y lo introducimos en la salsa procurando que quede cubierto por todas partes. Cuando la tengamos cubierta de salsa por todas partes entonces procederemos a rebozar en las cortezas trituradas. 

Cogeremos una bandeja de horno en la que habremos puesto papel de horno para que no se nos peguen e iremos poniendo los trocitos de pollo rebozados de manera que no se toquen unos con otros. Cuando los tengamos todos puestos, introducimos la bandeja en el horno y lo dejamos durante unos 20 minutos aproximadamente dependiendo del horno. Si es un horno de convención por aire igual tarda un poco menos. 

Y ahora las acompañáis con unas verduritas crujientes y a disfrutar!!

2 comentarios sobre “«Fingers» crujientes de pavo al estilo Buffalo 

Deja un comentario