Hoy os voy a explicar un forma diferente de preparar el calabacín, lo haremos al horno de una manera muy sencilla, al estilo «hasselback».
El estilo de corte Hasselback tienen su origen en Suecia. Y habitualmente se usa en las patatas. Consiste en hacer cortes a lo ancho de la patata o del alimento que usemos, sin llegar a partirla del todo, para introducir distintos ingredientes entra las rodajas.
Por lo tanto hemos de decir que esta receta y similares se suele hacer con patata, pero con otras verduras como los calabacines también queda genial.
En este caso hemos puesto un poco de queso y bacon pero podemos prepararlos con cualquier otro relleno que nos apetezca.
INGREDIENTES:
Para 4 raciones
- 2 calabacines grandes o 4 pequeños
- 50gr de bacon
- 100gr de queso rallado,
- 25gr de mantequilla
- Ajo picado o en polvo
- Sal y pimienta
PREPARACIÓN:
Empezaremos cortando los calabacines al estilo Hasselback. Les quitaremos las puntas y, si son muy grandes los partiremos por la mitad.
Para ello, los cortaremos a rodajas sin llegar a al final. Para evitar cortar demasiado y partir el calabacín utilizaremos un par de palos de brochetas, o unos palillos chinos que colocaremos a cada lado del calabacín.
Pondremos los calabacines en una bandeja de horno.
Fundiremos la mantequilla y le añadiremos el ajo, la sal y pimienta.
Verteremos esta mezcla sobre los calabacines intentando que tambien llegue dentro de los cortes, podemos ayudarnos de un pincel.
Hornearemos los calabacines durante unos 35 minutos a 200ºC
Mientras se hornean, pondremos el bacon en una sartén a fuego medio sin nada de aceite hasta que este dorado y crujiente
Sacaremos los calabacines cuando haya trascurrido el tiempo y repartiremos el bacon por encima y entre los cortes.
Espolvorearemos con el queso rallado y lo meteremos de nuevo al horno unos 5-10 minutos más hasta que el queso se funda, podemos ayudarnos del gratinador.
Y ya solo nos quedará servirlos y…A disfrutar!!