Arroz de montaña con trompetas de la muerte

Hay muchos tipos de arroz, empezando por la paella y acabando por el Risotto pero entre ellos hay uno que a mí me gusta mucho, que es el típico arroz que encuentras en pueblos de montaña y que suele estar compuesto por buenas carnes del lugar, también acostumbra a llevar setas o algún producto típico de la zona 

Hoy os pondré una receta que aúna un poco los diferentes arroces de montaña que he probado y que tiene bastante éxito en casa

Un toque diferencial de este arroz son las setas trompetas de la muerte, pero las puedes sustituir por cualquier otro tipo de seta. De igual manera, la carne también se puede variar aunque esta que yo pongo le da un toque perfecto.

En Catalunya este tipo de arroz se suele conocer como , arròs de muntanya, aunque en otros lugares se conoce como arroz de cazuela 

Animaros a prepararlo, porque como veréis, los ingredientes son muy fáciles y la verdad es que queda buenísimo

INGREDIENTES: (para 4)

  • 400 g de arroz
  • 30 g trompetas de la muerte secas
  • 4 salchichas de cerdo, o una butifarra, aunque si la butifarra puediera ser de setas entonces rozaremos el cielo
  • 8 trozos de conejo, mejor si son los muslos
  • 2 trozos de costilla de cerdo
  • 3 tomates maduros
  • 1 puerro
  • 1 cebolla picada
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharada de pimentón
  • aceite de oliva
  • pimienta negra
  • Caldo de pollo, a ser posible casero
  • Vino rancio
  • sal y pimienta

 

PREPARACIÓN

Pondremos en remojo las setas para que se hidraten , ponerlas en un bol con agua buena pues luego la aprovecharemos .

Mientras se hidratan, una media hora, iremos preparando las verduras 

Cortaremos la parte blanca del puerro en trocitos muy pequeños, y de la misma manera lo haremos con la cebolla. El ajo lo cortaremos en láminas y los tomates los rallaremos para obtener la pulpa. En la pulpa del tomate pondremos un poco de pimentón y lo mezclaremos.

Resérvaremos todo y pasaremos a preparar la carne.

Cortaremos la salchichas, o la butifarra en trocitos pequeños y también cortaremos las costillas de cerdo, aunque os recomiendo que le digáis a vuestro carnicero que os las corte pues siempre será más fácil. En cuanto al conejo, yo para este plato acostumbro a comprar únicamente muslos ya que mejoran la presentación y además, son mucho más fáciles de comer.

Salpimentaremos la carne, sobre todo el cerdo y el conejo porque las butifarras ya están suficientemente sazonadas 

Pondremos la cazuela al fuego con un chorro generoso de aceite de oliva y doraremos el ajo.

Cuando el ajo esté dorado, pero ojo, sin quemarse, pondremos la carne y la iremos dorando. Empezar por el cerdo a continuación el conejo y por último la butifarra.

La carne ha de quedar bien hecha y dorada por fuera 

Una vez en su punto, retiraremos la carne y reservaremos 

Aprovechando los jugos que ha dejado la carne, añadiremos a la cazuela la cebolla y dejaremos que se vaya haciendo hasta que esté transparente.

Pasados unos minutos, añadiremos el puerro. Mezclaremos bien con la cebolla y dejaremos que todo coja color.

Subiremos el fuego y tiraremos un chorro de vino rancio, con eso haremos subir los azúcares y le daremos más sabor

Ahora, pasaremos las setas por un colador y reservaremos el agua porque la aprovecharemos. Una vez escurridas las setas las incorporamos a la cazuela. Dejaremos que pierdan toda el agua y se tuesten un poco mientras vamos removiendo.

Removeremos un poco y añadiremos el tomate y removeremos un poco más y dejaremos reducir hasta que el tomate caramelice.

Ahora añadiremos la carne, removeremos otro poco, para que se impregne de loa aromas y los gustos. 

Pondremos el arroz e iremos removiéndolo para que se vaya perlando

Este será el momento de añadir el agua de hidratar las setas. Que previamente habremos calentado Si no tenemos suficiente para la cantidad de arroz añadiremos caldo (siempre caliente para no romper la cocción ).

El líquido ha de cubrir el arroz

Aconsejo que tengamos un poco más de caldo caliente por si se seca el arroz y hemos de añadir un poco más de liquido.

Dejaremos a fuego fuerte durante los primeros 5 minutos y después bajaremos el fuego y dejaremos cocer unos 12 minutos más.

De vez en cuando iremos revisando que no se seque e iremos removiendo suavemente para evitar que se pegue y cueza uniformemente.

Rectificaremos de sal y comprobaremos que el arroz esté en su punto 

Apagaremos el fuego y taparemos la sartén con papel de aluminio o similar y dejaremos que se acabe de hacer con el calor residual.

Después de unos minutos ya lo podremos emplatar.

Y…. A disfrutar!! 

Espaguetis con salsa vegetal de calabacín y berenjena

Me apetecían unos espaguetis pero algo diferente, así que decidí hacer una salsa vegetal.

El resultado quedó realmente bueno, por eso os voy a adjuntar la receta  esperando que os guste igual que a mi

INGREDIENTES (para 4 personas)

  • 320g de espaguetis
  • Dos ajos
  • Un calabacín
  • Una berenjena pequeña
  • Un puñado de queso rallado
  • 250 ml de nata
  • Aceite
  • sal y pimienta 
  • una pizca de nuez moscada
  • Parmesano rallado

PREPARACIÓN

Empezaremos haciendo la salsa. Para ello picaremos los ajos y la berenjena y el calabacín, que previamente habremos lavado bien.

Cuando lo tengamos bien picadito pondremos una sartén con un poco de aceite a calentar Y freíremos los ajos hasta que estén dorados, sin que lleguen a quemarse. Una vez el aceite se haya perfumado con los ajos tiraremos en la sartén la berenjena y el calabacín.

Dejaremos a fuego medio que la verdura se vaya pochando y vaya dejando el agua .

Mientras tanto pondremos agua a hervir para hacer la pasta. En más de una ocasión os he explicado cómo hacer la pasta, recordar lo que NO hay que hacer. No hay que poner aceite en el agua, ni hay que volcar la pasta en un recipiente para escurrirla ya que eso hará que tome todo el almidón de la cocción y se pegue. si tenéis alguna duda de cómo hacer la pasta me lo decís .

Cuando el agua llegue a ebullición, tiraremos un poco de sal y añadiremos la pasta, respetando el tiempo de cocción. Aunque yo, acostumbro a reducir ese tiempo en uno o dos minutos ya que a mí me gusta más al dente.

Mientras tanto, cuando la verdura ya esté por pochada, le añadiremos la crema de leche y dejaremos que ésta se evapore un poco y vaya tomando el gusto de las verduras A continuación, añadiremos el queso rallado y dejaremos que se vaya fundiendo.

Por último añadiremos un poco de nuez moscada rayada y rectificaremos de sal y pimienta

Sacaremos la pasta sin volcar el agua y la serviremos en los platos.

Y para acabar, añadiremos sobre la pasta la salsa de verduras que teníamos en la sartén y espolvorearemos el parmesano rayado por encima.

Ahora… A disfrutar!!

Hojaldre con nata y cerezas

Detecto que las recetas con hojaldre os gustan mucho. Ya que son las más visitadas. Pues para seguir en la línea, hoy os pongo un postre que hará las delicias de todos.

No es en absoluto complicado, aunque hay alguna parte que nos la podemos saltar. Luego ya os explico como.

INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS

  • 350 g de cerezas
  • 60 g de azúcar moreno
  • 1 limón
  • vino rancio
  • 1 cucharada mantequilla
  • 200 g de nata
  • 60 g de mascarpone
  • 35 g de azúcar blanco
  • una vaina de vainilla
  • amaretto
  • 1 hojaldre
  • un huevo
  • azúcar glas

PREPARACIÓN

Lo primero que haremos, será una especie de confitura de cerezas. Si queréis hacer la receta rápida podés comprar la confitura hecha, no es lo mismo, pero nos puede sacar de un apuro.

Otra opción (mejor) es tener preparadas confituras y mermeladas hechas en casa y así las podemos utilizar en diferentes recetas, cómo está.

Pero bueno, si la queremos solamente tendremos qué, sacar el hueso de las cerezas.

Después pondremos 1 cucharada de mantequilla en una sartén y echaremos las cerezas y 60 g de azúcar moreno por encima. Lo mezclaremos y dejaremos que se vaya cocinando a fuego medio.

Cuando ya esté integrado, levantaremos los azúcares añadiendo un chorro de vino rancio.

Exprimiremos limones hasta que conseguir 30 gramos de jugo y lo verteremos en la sartén y lo mezclamos todo dejándolo enfriar.

Pues esto nos lo podemos ahorrar comprando la confitura, pero como veréis tampoco es que sea un trabajo de titanes (excepto, quizás, sacar los huesos de las cerezas)

Tomamos una hojaldre y la cortamos en 3 trozos. Dos de iguales y el tercero, un poco más tarde. Al trozo más grande hacemos cortes pequeños con la punta del cuchillo para que cuando la ponemos en el horno y se hinche, no se rompa.

Batimos un huevo.

Ponemos en una bandeja papel sulfurizado, uno de los trozos pequeños de hojaldre. Lo pintamos con el huevo batido. Y encima ponemos otra bandeja de horno que nos ayudará a evitado que se hinche en exceso.

En la bandeja de encima ponemos el otro trozo pequeño de hojaldre sobre un papel sulfurizado. Añadimos la compota de cereza sobre esta hojaldre. Y cerramos la compota con la parte grande de la hojaldre que habíamos cortado. Con un tenedor, sellamos las bandas.

Pintamos la parte de arriba de la pasta de hojaldre con un huevo batido. Y hay espolvoreamos un poco de azúcar moreno por encima.

Hornear las dos bandejas a 200 grados, 15 minutos.

  Hacemos la chantilly: mezclamos 35 g de azúcar con la pulpa de una vainilla.

Montamos en un bol 200 gramos de nata con las varillas eléctricas. Vamos añadiendo, a medio montar, y poco a poco, el azúcar con la vainilla.

  En otro vuelo batiremos 60 g de mascarpone con las varillas eléctricas. Añadimos un chorro de amaretto y la integramos con las varillas.

  Con la lengua pastelera, mezclamos la nata montada y la crema de mascarpone. Lo ponemos todo en una manga pastelera y reservamos en la nevera.

  Sacamos el hojaldre del horno y la dejamos templar.

  Montamos en base de hojaldre la chantilly y, encima, ponemos el hojaldre con el relleno de cereza.

Por último, echamos azúcar lustre por encima. Lo servimos.

Frankfurt ”con gabardina”

Os vengo observando, y he visto que las recetas con hojaldre os suelen gustar mucho. Quizás esas recetas no sean las más sanas, o las más saludables, pero sin duda, son de las más sabrosas.

Como os he dicho muchas veces, es importante que de cuando en cuando nos permitamos un capricho, por lo que ahora os paso esta receta de salchichas de Frankfurt «en gabardina» que es una forma diferente y divertida de presentarlas.

Salchichas de Frankfurt hay muchas, por lo que os aconsejo que a la hora de preparar esta receta escojáis unas salchichas de calidad (qué también las hay)

INGREDIENTES

    1 lámina de Masa de hojaldre rectangular
    Salchichas de Frankfurt (depende del tamaño, las que os quepan en la masa, de 4 si son grandes a 12 si son pequeñas)
    1 Huevo
    50 gr Ketchup
    50 gr Mostaza
    50 gr Mayonesa

PREPARACIÓN

Primero precalentaremos el horno a 200º

Mientras tanto cortaremos tiras de hojaldre de 1 cm. de grosor

Enrollaremos las tiras sobre la salchicha de Frankfurt en forma de espiral. A medida que tengamos envueltas las salchichas las iremos poniendo sobre una bandeja de horno cubierta con papel vegetal

Cuando las tengamos todas, batiremos un huevo y pintaremos el hojaldre con él.

Hornearemos durante 15 minutos, hasta que el hojaldre esté dorado

lo serviremos acompañado de ketchup y mostaza, a poder ser también de buena calidad.

Y ya sabéis… A disfrutar!!

Hojaldre de pera, nueces y Gorgonzola

Hola, hoy os pongo una receta que en principio no sería paleo, a no ser que utilicemos un hojaldre que si que lo sea. O, si nos lo hacemos nosotros utilizando, por ejemplo, harina de coco. Ya os enseñaré como. Pero la verdad que es una receta súper rápida que queda muy buena y que vale muy bien para utilizarla como un aperitivo. O como un plato para una cena con amigos o alguna cosa informal.

Además, ahora que entramos en periodo de fiestas, siempre es bueno tener opciones que poner en la mesa. Y si encima están super buenas, ¿que más podemos pedir?

INGREDIENTES

  • Una lámina de hojaldre rectangular
  • Un huevo
  • 2 Peras Conference
  • 80g de queso Gorgonzola
  • 3 cucharaditas de miel
  • Un puñado de nueces
  • una copa de vino dulce (moscatel) (opcional)

PREPARACIÓN:

Empezaremos precalentando el horno a 200°-C.

Lavaremos bien las peras y las secaremos. A continuación las laminaremos contando de descartar el corazón con las semillas y las láminas de los extremos que será todo piel.

Pondremos en remojo las nueces, esto lo hacemos para que no se quemen o se resequen demasiado en el horno. Esto podemos hacerlo incluyendo en el agua del remojo de las nueces la copa de vino lo que les dará todavía un toque más sibarita

Estiraremos la masa de hojaldre lo máximo que podamos, siempre es bueno hacerlo con un rodillo.

Ahora, tendremos que decidir si queremos hacer una sola bandeja con todo el hojaldre o queremos hacer porciones para los diferentes comensales. En cualquiera de los casos, o dejamos extendida toda la masa sobre papel de horno o antes de meterla en el horno la cortamos en porciones. Lo ideal serían unas ocho porciones. Para hacer estas ocho porciones, únicamente tendremos que recortar ocho rectángulos iguales.

Con un tenedor, pincharemos la base (excepto los bordes) para que no suba demasiado cuando la pongamos en el horno.

Batiremos el huevo y con un pincel, pintaremos toda la masa.

Empezaremos a poner todas las láminas de pera encima de la masa, si habéis optado por hacer porciones entonces tendréis que ponerlas en el centro de cada porción.

Repartiremos por encima de las peras, todo el queso, las nueces, y la miel

Ahora, solo nos quedará hornear durante unos 15 minutos, hasta que la pasta esté dorada.

Ya habéis visto que el resultado es super fácil simplemente hay que tener en la nevera los ingredientes por si acaso, ya que no se sabe nunca quien nos premia con su presencia😉

 

He de decir, esta receta está hecha como si fuera un hojaldre. Pero podemos cambiar la masa de hojaldre por masa de pizza y tendremos una pizza igual de suculenta

Y, la utilicéis como la utilicéis, como siempre… A disfrutar!!

magdalenas de calabaza

Seguimos en otoño, con sus colores naranjas y calabazas. Y, como ya hemos dicho muchas veces, hay que aprovechar los productos de temporada. Un producto de temporada del otoño es, por descontado, la calabaza que, aunque podemos encontrar prácticamente todo el año, ahora es cuando está en su mejor momento.

Hoy, os voy a presentar una receta de magdalenas. Pero unas magdalenas un poco especiales ya que las vamos hacer con calabaza que les dará un sabor y una textura diferentes a las habituales.

INGREDIENTES:

  • – Tres huevos
  • – 400 gramos de Calabaza
  • – 3 cucharadas de aceite de calabaza
  • – 200 gramos de harina
  • – Un sobre de levadura en polvo
  • – 150 gramos de azúcar
  • – 100 gramos de mantequilla

PREPARACIÓN:

Primeramente pelaremos la calabaza y la troceamos en trozos pequeños. Esta calabaza la podemos poner a cocer en agua con un poco de azúcar disuelta. Aunque os aconsejo ponerla en la LEKUE en el microondas durante 4 minutos con un poco de azúcar disuelto en un poco de agua por encima, es mucho más fácil, y más limpio.

Cuando esté bien tierna, la escurriremos y trituraremos y la reservaremos dejándola enfriar

Precalentáremos el horno a unos 200ºC.

Mientras se calienta el horno y se enfría la calabaza, empezaremos a preparar la masa para las magdalenas de calabaza.

Utilizaremos una batidora con varillas y mezclaremos bien la mantequilla y el azúcar. Luego añadiremos el aceite de calabaza (si no tenéis, podéis poner otro tipo de aceite, de oliva, por ejemplo) y los huevos, y volvemos a batir, hasta conseguir una mezcla uniforme.

Ahora, en otro bol, cogeremos la harina y con un colador la tamizaremos por encima para que no queden grumos. En este paso es donde pasamos de la receta paleo a no paleo, dependiendo del tipo de harina que pongáis (Podemos utilizar harina de trigo, que no sería paleo, o cualquier otro tipo de harina como de coco, de espelta, de garbanzo, etc…) aunque como ya os he dicho en alguna otra ocasión, las normas son para saltárselas por lo que vosotros mismos.

A continuación, echaremos levadura y también la mezclaremos y cuando tengamos la harina y la levadura mezcladas, las iremos incorporando poco a poco a la mezcla anterior, batiendo cada vez que añadamos harina para así obtener una masa fina y sin grumos. Por ultimo añadimos la calabaza cocida y damos un último toque de batidora para que se reparta bien.

Ahora que ya tenemos la masa preparada, tendremos que rellenar los moldes. Aquí cada cual que utilice los moldes que quiera, es decir, puedes utilizar moldes de papel, como los de las típicas magdalenas o puedes utilizar moldes de silicona que son los que utilizo yo porque luego se pueden reaprovechar para más magdalenas.

Es conveniente que los moldes no los llenéis hasta arriba del todo porque luego la masa sube.

Cuando ya los tengamos preparados, metemos las magdalenas al horno y horneamos unos 20 o 25 minutos con cuidado que no se nos quemen.

Podremos comprobar si están en su punto pinchando con un cuchillo, y si está en su punto, este saldrá seco.

Dejaremos que se enfríen antes de desmoldarlas. Y a partir de ahí solo nos queda… Disfrutar!!

Auténticos spaghetti «a la carbonara»

Hola, hoy os voy a poner una receta que no es paleo pero que es tan habitual y que nos saca de tantos apuros que no he podido prescindir de ella.

Lo primero que tengo que decir, es que hay sitios donde proclaman que tienen espaguetis a la Carbonara pero no lo son en absoluto ya que, el primer error es poner crema de leche, los verdaderos Carbonara no llevan crema de leche. Es decir, que pueden estar muy buenos pero que los llamen de otra manera.

Para algunos la palabra carbonara proviene de carbone, que en italiano es la denominación de carbón (Carbonari), y se cree que el nombre del plato tiene su origen en el plato típico de los elaboradores de carbón vegetal en los Apeninos. ¿Veis algún minero llevando su botellita de crema de leche para ir a la mina?

De hecho, los carboneros se los comían fríos , como si fuera un bocadillo ya que al enfriarse el almidón de la pasta y del huevo formaban una pasta más fácil de llevar en la bolsa al trabajo.

Lo que pasa es que, hacerlos con crema de leche es mucho más fácil ya que le damos una untuosidad y cremosidad que sin ella es un poco más complicado.

Aunque, si seguís mis pasos o saldrá perfecto y no tenéis que poner crema de leche. Bueno, cada uno puede hacer lo que le parezca pero esta es una opción si lo queréis es seguir la receta tradicional del Lacio y más concretamente de Roma.

Por cierto, también podéis hacer este plato utilizando calabacin en lugar de espaguetis y en ese caso si sería paleo, como hemos hecho en estas otras recetas.

Espaguetis de calabacín a la carbonara.

O los espaguetis al pesto de aguacate

INGREDIENTES:(para 3)

  • – 300 g de buenos spaghetti
  • – 3 yemas de huevo
  • – 150 g de tocino ibérico
  • – 150 g de queso Pecorino o Parmigiano rallado
  • – Pimienta negra
  • – Sal
  • – Aceite de oliva virgen extra
  • – Tomillo picado
  • – nuez moscada

PREPARACIÓN:

Comenzaremos poniendo a hervir la pasta en una olla con abundante agua que salaremos en el momento que empiece a hervir. Y sobre todo!! No pongáis aceite en el agua, no es verdad que así no se peguen los espaguetis. La manera que no se peguen los espaguetis es sacarlos del agua con unas pinzas y no vaciando el agua, ya que así todo el almidón que se quedo abajo cae encima de los espaguetis apelmazándolos.

Mientras hierve el agua, troceamos el tocino y lo salteamos en una sartén con un chorrito de aceite ( muy poco, que el tocino ya tiene su propia grasa) y pimienta.

Cogeremos un bol y batiremos las yemas de los huevos, si queréis poder introducir una clara (El resto las podéis aprovechar para hacer una tortilla aburrida)

Tomaremos nota de las indicaciones del fabricante para hacer la pasta al dente. Un minuto antes de ese tiempo, es decir antes de que la pasta esté cocida, la sacamos de la olla empleando unas pinzas o un utensilio especial para la pasta y la escurrimos.

A continuación la añadimos a la sartén donde tenemos el tocino para terminar de cocinarla. Para que no se acabe secando, añadiremos un poco del agua de cocción, (un par de cucharadas)

Agregamos a la sartén, el queso rallado y las yemas batidas y removemos intentando que las yemas queden cremosas y que no cuajen formando tortilla.

Cuando la pasta esté lista la emplatamos, podemos rectificar de sal, contando que el tocino ya lleva. Añadimos un poco de tomillo picado y un poquito de aceite y servimos.

Para degustarla podemos poner un poco más de queso y si queremos, también podemos añadir un poco de nuez moscada rallada.

Ahora solo necesitaremos llevarla a la mesa, y a disfrutar!!

Arroz con bogavante y gambas

Hola y feliz año a todos, seguimos en fiestas y nada mejor para una fiesta que, disfrutar de un sabroso plato de arroz con bogavante. Este plato es mucho más espectacular que difícil pero solamente con el olor que deja en casa ya hace fiesta. Imaginaros luego cuando lo probáis.

En el arroz con bogavante, como en tantos otros arroces, cada maestrillo tiene su librillo. Por ejemplo, hay quien le pone pimiento pero yo no se lo pongo porque en casa, el pimiento no gusta mucho. También hay quien no pone gambas, pero yo si le pongo ya que le da un poquito más de alegría al arroz.

También hay a quien le gusta más o menos caldoso. A mi, particularmente, me gusta poco caldoso y es así como lo hago, luego cada uno que lo haga como mejor le guste.

Pero en cualquier caso servirás un plato que es exclusivo de los mejores restaurantes y que podrás hacer tú mismo con un poquito de empeño. El resultado, ya lo comprobarás. No podrás hacerlo sólo una vez, tendrás que seguir haciéndolo más veces por petición popular jeje

INGREDIENTES. (Para unos 4)

  • 1 bogavante,
  • Un plato de gambas peladas
  • 100 gr. de arroz bomba por persona
  • 3 cebolletas
  • 3 dientes de ajo
  • 3 tomate pera rallados
  • 1 pellizco de azafrán,
  • 1  cdta de pimentón o paprika dulce
  • Coñac
  • 1 ramita de perejil picado
  •  1´5 l. de fumet de pescado (si en caso de apuro no tienes caldo de pescado puedes poner uno ya preparado, aunque te recomiendo hacer un caldo natural)
  •  aceite de oliva virgen extra
  • sal.


Picamos muy fina la cebolleta, el ajo y el perejil y rallamos el tomate. Lo reservamos todo.

Ahora viene la parte más «complicada» del tema, partir el bogavante. El bogavante podéis comprarlo fresco o congelado. Yo prefiero comprarlo congelado, más que nada por ahorrarme  el tener que matarlo que, la verdad, no es muy agradable. En cualquier caso trocearlo es igual, aunque si lo hemos comprado congelado se mueve menos😉. En caso que lo tengáis congelado es conveniente dejarlo descongelar en la nevera mínimo 24 horas antes.

Para cortar el bogavante podemos hacerlo de varias maneras, creo que la más fácil es: separar la cabeza del cuerpo, luego hacer un corte longitudinal en el centro de las dos partes que os quedan. Para ello necesitaremos un buen cuchillo afilado, pues hay que hacer presión. Una vez tenemos las 4 partes le hacemos dos cortes horizontales y para finalizar le desmontamos las pinzas. Le daremos unos golpes en las pinzas para que se hagan mejor y además así poder abrirlas mejor a la hora de comer el arroz.

Es conveniente que estos cortes los hagamos sobre un recipiente para poder recoger los jugos que deje, pues también irán a la cazuela para dar sabor.

Ahora cogeremos una cazuela grande y la pondremos a calentar a fuego medio y con un chorreón de aceite de oliva virgen. Una vez el aceite esté caliente echaremos los trozos de bogavante y los saltearemos, veremos que cogen un color rojo espectacular. Después de un ratito, sacamos el bogavante y lo reservamos.

En el mismo aceite ponemos el ajo picado junto a la cebolla con un poco de sal por encima, y sofreiremos a fuego medio durante unos  minutos, hasta que se pochen bien, removiendo para que se cocinen bien por todos lados.

Echamos el pimentón dulce, lo removemos para mezclar y cuando se haya cocinado un minuto o dos, entonces echamos el tomate triturado y bajamos a fuego suave  y vamos mezclando  para dejar que el tomate se cocine y se reduzca.

Cuando se haya evaporado el agua del tomate tiramos las gambas y las hebras de azafrán, removemos y añadimos un chorreón de coñac y dejamos un rato que se evapore el alcohol.

Entonces echamos el arroz,  recomiendo  que sea tipo bomba, lo vamos removiendo un poco a fuego medio para que vaya cogiendo todos los sabores.

Ahora volvemos a poner el bogavante y echamos el caldo (que teníamos al fuego a punto de ebullición )

Mantenemos a fuego fuerte 10 minutos, bajamos el fuego y cocinamos entre 6 y 8 minutos más, revisando el nivel de caldo por si hemos de añadir un poco más y porque lo dejaremos al nivel de caldoso que nos apetezca.

Ahora ya sólo queda servirlo en un plato con un poco de gracia y aunque siempre os digo a disfrutar! en esta ocasión os diré A DISFRUTAR!!!!!!<<<<<<<

Risotto de boletus

Hoy os pongo un plato que no es paleo, pero siempre tiene tanto éxito en casa que lo tengo que ir haciendo de vez en cuando para que mi familia no me mire mal, después de tanta dieta paleo 😉Además,  tal y como os he dicho en alguna ocasión hay que dar un poco de alegría al cuerpo y dar márgenes o de lo contrario…

Este es un plato que acostumbro ha hacer en otoño. Aunque curiosamente siempre utilizó setas (boletus edulis, en catalán ceps) que he recolectado el año anterior y he dejado secar, también las podría hacer con las del propio año, pero las frescas las utilizo para otras recetas. 

Por descontado es un plato que se puede hacer en todas las estaciones, pero parece que el olor a seta que queda en casa, presta más a otoño que a otra época. 

INGREDIENTES :

  • Entre 80 y 90 g de arroz bomba por persona
  • Dos puñados de boletus secos
  • Una cebolla
  • Un diente de ajo
  • Perejil fresco
  • Queso parmesano
  • Medio litro de caldo de verduras
  • Aceite de oliva
  • Mantequilla
  • Sal y pimienta

Es conveniente que el arroz sea tipo Bomba ya qué da mejor resultado. La variedad de arroz Bomba es una de las más conocidas y valoradas, a pesar de su precio, gracias a su capacidad para absorber grandes cantidades de caldo sin pasarse.  Absorbe hasta el punto de llegar a duplicar su volumen. Así, retiene los sabores del caldo. Una característica que nos va muy bien para el plato es que una vez superado el tiempo de cocción no se rompe, sino que se abomba —de ahí su nombre— y se arruga un poco. Esta peculiaridad le permite guardar el almidón, con lo que siempre sale suelto, sin apelmazarse.

PREPARACION

Lo primero de todo, dejamos las setas a remojar en agua buena durante un buen rato

A continuación picamos la cebolla muy finita. Ponemos en la cazuela un poco de aceite y un poco de mantequilla y tiramos la cebolla, añadimos un poco de sal y dejamos que se vaya pochando a fuego lento hasta que quede transparente y marroncita

Una vez tengamos hidratadas las setas las colamos y aprovechamos el agua, que pondremos a calentar. Es también un buen momento para poner a calentar el caldo de verduras

Cuando la cebolla ya está lista la retiramos de la cazuela y la reservamos. En la misma cazuela y con el poco aceite y que haya quedado de la cebolla tiramos las setas y las vamos removiendo para que vayan perdiendo el agua que tengan. Picamos una ajo y un puñadito de perejil y se lo tiramos a las setas y vamos removiendo durante un rato a fuego lento añadiendo un poco de sal. 

Cuando las setas ya estén en su punto, es decir, que hayan cogido el gustito del ajo y el perejil, incorporamos la cebolla que teníamos reservada y removemos 

Ahora tiraremos el arroz, es conveniente que el arroz no lo hayamos lavado antes porque así nos quedará más untuoso. 

Vamos moviendo el arroz entre los ingredientes para que vaya cogiendo un tono perlado. Cuando el arroz esté perlado será el momento de tirar el líquido. 

Tiraremos primero el agua de las setas, yo siempre aprovecho el agua de hidratar las setas. Hay quien dice que ese agua no es buena, pero a mí me gusta aprovechar todo el sabor que han dejado las setas en el agua (acordaros de colarla por si ha quedado algo de tierra. Después tiraremos una parte del caldo hasta que quede todo el arroz cubierto. El resto de caldo lo reservaremos por si el arroz absorbe todo el líquido. 

Ahora lo dejaremos unos 15 minutos a fuego lento con la cacerola tapada. Es conveniente ir controlando que no se quede seco, en ese caso le ponéis un poco más de caldo. Cuando haya pasado ese tiempo probáis que el arroz esté en su punto, es decir, que no esté duro. Ha de quedar cremoso, pero no caldoso. Es decir, que se pueda comer con tenedor. Así es como, según todos los manuales de cocina debe quedar un buen risotto. 

Entonces si está en su punto, aprovechamos para tirar por encima el parmesano rayado. 

Una vez hemos tirado el parmesano removeremos el arroz para que el queso se vaya diluyendo entre los granos y vaya haciendo a la textura de risotto. Ahora apagaremos el fuego y dejaremos el arroz tres o cuatro minutos para que coja el punto. 

Ahora ya lo podemos servir, lo acompañaremos con más queso parmesano rayado para que cada comensal se ponga por encima, y una vez hecho esto ya sólo nos queda disfrutar!!

Porra antequerana

Hoy aprovechando que ya se acabado el verano voy a poner una receta precisamente de verano para así despedir como Dios manda a esa estación que tantos calores nos ha dado. Basándome en una receta de mi compañero bloguero momentos con sabor en la que nos recomendaba un salmorejo me acordé de un plato muy parecido que hacemos en casa de mi madre.

Pero curiosamente no os hablaré del salmorejo. Aunque habitualmente todo el mundo llama salmorejo a esta comida o a una muy similar,  en casa siempre la hemos llamado porra, ¿porqué?, pues no se, pero así ha sido siempre. Concretamente se trata de la Porra Antequerana, que en principio es muy similar al salmorejo pero con alguna variación. El Salmorejo es un plato típicamente cordobés, sin embargo la Porra es un plato Malagueño y tienen muy pocas diferencias (a no ser que pongas a discutirlo a un malagueño y un cordobés jeje)

La diferencia principal, por poner alguna, es que la Porra lleva los mismos ingredientes que el Salmorejo, pero también lleva un pimiento verde y quizás un poco más de pan (es por ese pan por lo que no es una receta paleo, pero ya sabéis, tampoco hay que ser estrictos). El salmorejo se suele acompañar de huevo y jamón, y la Porra también (parece un chiste de Eugenio) aunque también la he visto acompañada con atún y huevo duro, aunque yo lo suelo acompañar con huevo y jamón.

INGREDIENTES 

  • 1 k. de tomates maduros. 
  • 1 pimiento verde
  • 250 g de miga blanca de pan del día anterior
  • medio diente de ajo (le sacamos el germen para que no se repita)
  • aceite de oliva virgen
  • un chorrito de vinagre
  • 1 pizca de sal

Para acompañar

  • Jamón ibérico picado
  • huevo duro picado.

PREPARACION

Lavamos y pelamos los tomates y los cortamos en cuatro y luego los metemos en el vaso de la trituradora. Lo mismo hacemos con el pimiento y luego ponemos el resto de los ingredientes en la batidora menos el pan. Trituramos hasta que quede liquido y luego añadimos el pan que habremos cortado en trozos pequeños para que quepan en la batidora. Seguimos triturando hasta que quede cremosa y ya lo tendremos. A continuación lo ponemos en la nevera y a la hora de servir lo acompañamos de tacos de jamón pequeños y los huevos duros también cortados en cuadraditos.

Se puede comer con cuchara, pero si os volveis locos y pasais de dietas y esas cosas, probar a comerlo utilizando trozos de pan ya veréis como no tiene nombre.

y ahora como siempre, a disfrutar!!