Torrijas

Hoy os presentó un plato típico de Semana Santa, las famosas torrijas. La verdad es que en cada casa se hacen de una manera diferente, pero os explicaré como las hago yo y la verdad es que salen riquísimas.

Yo no suelo hacerlas por cuestión de peso 😉 pero la verdad es que aunque sea en Semana Santa vale la pena darse un capricho.

INGREDIENTES

  • 4 rebanadas de pan de barra (es importante que sea un pan bastante apretado)
  • 250 g de leche
  • 100 g de nata
  • 3 huevos
  • 1 rama de canela
  • 1 anís estrellado
  • cáscara de limón, lima y naranja
  • una cucharada de semillas de anís o matalauva o de hinojo
  • harina de fuerza
  • canela en polvo
  • azúcar panela
  • anís de naranja

PREPARACIÓN

Pondremos al fuego un recipiente con 250 g de leche y 100 g de nata con una cáscara de lima, una de limón y otra de naranja, 1 cucharada de semillas de anís, 1 rama de canela y 1 flor de anís estrellado.

Cuando rompa a hervir, sacaremos la cazuela del fuego, la taparemos y la dejamos infusionar durante 30 min.

Tras este tiempo de infusión colaremos esta leche infusionada en un tupper ancho.

Cortamos 4 rebanadas gruesas de una barra de pan con la miga muy espesa (saber elegir el pan es una parte muy importante de la receta).

Tenemos dos opciones, hacer las torrijas, con o sin alcohol. Si las queremos hacer con alcohol, rociaremos con un poco de anís (a ser posible de naranja) y si las queremos hacer sin alcohol, pues no se lo ponemos.

Ahora las pondremos dentro del tupper de la leche, dejando que se empape durante unos 20 minutos, girándolas para que se empapen por ambos lados.

Después pondremos las rebanadas en el congelador y las dejaremos una media hora. Esto lo haremos para poder trabajar mejor con ellas, porque al estar mojadas en leche son frágiles y al congelarlas no se rompen y nos facilita el trabajo

Calentaremos aceite OVE en una sartén.

Mientras tanto, batiremos tres huevos en un plato

En otro plato pondremos unas 2 cucharadas de harina de fuerza. Normalmente no se utiliza harina, pero así el huevo para rebozar se engancha mejor.

Preparamos una bandeja con papel absorbente.

Mezclamos, en otra bandeja, cuatro cucharadas de azúcar panela y una cucharadita de canela en polvo.

Ahora que lo tenemos todo preparado para rebozar y freír, sacaremos las rebanadas del congelador.

Pasaremos las rebanadas por la harina, una vez enharinadas las sacudimos para quitar la harina sobrante pues nos interesa que haya la minima.

Continuaremos luego por el huevo batido y las freímos con el aceite bastante caliente, dándoles la vueltas necesarias para qué se hagan por todas partes con cuidado que no se quemen.

Dejamos las rebanadas fritas en la bandeja con papel absorbente para eliminar el aceite que sobra.

Después las rebozaremos en la bandeja de azúcar con canela. Y ya estaría.

Hay quien les pone miel por encima, pero en mi caso considero que ya están bastante dulces.

Ahora, ya sabéis…A disfrutar!!

Sepia rebozada

Hoy os pongo una receta, que así en principio por el nombre parecería poca cosa. Bien no deja de ser una sepia rebozada, pero el rebozado será una poco especial y además la acompañaremos con una salsa que harán que una simple sepia sea un plato de lujo.

INGREDIENTES, para 4

  • 4 pencas de sepia
  • 1 puñado de palitos de pan (a ser posible integrales)
  • harina
  • Aceite

 Para la masa

  • 250 g de harina
  • 7g de levadura fresca
  • 600 ml de cerveza negra (si no tenéis negra podéis substituirla por rubia)
  • sal
  • Pimentón ahumado dulce
  • pimienta negra

 

Para el alioli

  • 1 huevo
  • 1 diente de ajo escalivado
  • Aceite de oliva virgen extra
  • sal
  • pimienta
  • 1 sobre de tinta
  • 1 Melsa de la sepia *

La melsa (en catalán) o bazo de la sepia en castellano, o salsa de la sepia, es una parte que si no la conoces, lo normal es que la desechen, pero es un ingrediente fantástico para enriquecer enormemente tus recetas. En apariencia es una parte de las tripas y de algún modo lo es, ya que es el bazo o mejor dicho el hepatopancreas  pero, contiene un líquido viscoso, de color marrón claro, que es un golpe de sabor a pescado concentrado, a mar. Un secreto con el que mejoraras muchísimo tus resultados culinarios. La próxima vez, ya sabes, di en tu pescadería que te la den junto con la sepia.

PREPARACIÓN

Escalivaremos (asaremos) una cabeza de ajos en el horno a 220 grados durante 35 minutos, aunque una forma más fácil es poner la cabeza de ajos en un recipiente para microondas y taparla con papel film y cocinarla durante unos dos minutos, el resultado es muy similar y nos ahorramos mucho tiempo. Aunque solo necesitaremos un diente del ajo, el resto lo podemos guardar para otras recetas, como por ejemplo el Bacalao al horno con crema de ajo

Mientras el ajo se asa, si hemos decidido hacerlo al horno, haremos una especie de masa Orly:

Para ello pondremos en un bol 250 g de harina (que tamizaremos para evitar grumos), 7 g de levadura fresca, 600 ml de cerveza negra, una pizca de pimentón ahumado, un poco de pimienta negra. Removemos y cuando la levadura se haya activado pondremos la sal (si la ponemos antes costará más activar la levadura). Dejaremos reposar unos 20 minutos.

Mientras tanto iremos haciendo el alioli.

Coceremos en una sartén, con un poco de agua, un sobre de tinta y una cucharada de melsa a fuego lento durante 5 minutos. En un vaso de triturar ponemos un huevo, la mezcla de la melsa y la tinta, sal, pimienta, un diente de ajo asado y lo emulsionamos con aceite de oliva hasta conseguir la mayonesa, nos tiene que quedar un alioli negro, que también podemos utilizar en otros platos si sobrara. Por ejemplo el bacalao con alioli de ajo negro.

Tomamos las 4 pencas de sepia, reservaremos las patas para algún otro plato. Cortaremos con cortes al sesgo creando rombos sobre la sepia, sin llegar a cortar del todo, de esa manera el rebozado entrará mejor y se hará mejor. Las reservamos un momento.

Trituraremos los palitos de pan con un molinillo, os de alguna otra manera. El caso es que deberían quedar trozos pequeños de palitos, no debemos triturar del todo ya que queremos notar los trozos.

Tomaremos la sepia reservada, la enharinamos con poca harina y eliminando la sobrante y la pasamos por la salsa Orly empapándola muy bien. Os recomiendo que utilicéis una pinzas y finalmente las rebozamos con el pan rallado. Veremos que nos quedan de un grosor considerable, perfecto!

Calentaremos el aceite en una sartén o en una freidora y freímos la sepia. Una vez hecha, la ponemos en un bol con un papel de cocina que absorba el exceso de aceite.

Emplataremos la sepia y lo acompañamos con el alioli negro.

Veis que una simple sepia nos puede hacer un plato realmente espectacular y buenísimo, y ya sabéis…A disfrutar!!

Hamburguesa casera de pollo

Hamburguesas hay muchas, y de muchos tipos de carne. Hay quien no se fía de la calidad de las hamburguesas, aunque yo os puedo asegurar que si la comprais es en vuestra carnicería de confianza no tenéis por qué. Pero si las hacemos nosotros en casa entonces, solvencia contrastada!!

De hecho, ya os he puesto alguna otra receta de hamburguesa casera incluso alguna más sofisticada como las hamburguesas al Oporto

Pero hoy voy a poneros una receta, que me pasó mi carnicera, de una hamburguesa de pollo hecha en casa que está espectacular.

Por descontado, es más laboriosa hacerla en casa que utilizar una ya hecha, Pero el resultado no tiene nada que ver.

Si lo queréis comprobar, la receta es esta:

INGREDIENTES (4 PERSONAS)

  • 350 gr de pechuga de pollo.
  • 350 gr de contramuslo .
  • 100 gr de miga de pan .
  • 150 gr de nata (35%).
  • Pimentón dulce .
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal .
  • 3 dientes de ajo –
  • 1 huevo .
  • 1 cebolleta
  • Mostaza de Dijon.
  • Brotes de berros o rúcula .
  • 1 lima
  • Perejil .
  • 4 panes de hamburguesa
  • Pimienta negra
  • Cebollino

PREPARACION

Prepararemos un recipiente con la miga de pan, el huevo, la nata y el pimentón.

Cortaremos muy pequeños los 3 dientes de ajo y el perejil y lo añadimos al recipiente.

Le quitaremos la piel a los contra muslos y los cortaremos en trocitos muy pequeños así como la pechuga de pollo.

Una vez tenemos toda la carne cortada muy pequeñito (quizás esta es la parte más laboriosa de la receta, pero también es la que le da ese toque casero tan bueno) la añadimos al recipiente y lo mezclamos con el resto de ingredientes hasta conseguir una masa.

Taparemos el recipiente con papel film y lo dejamos reposar en la nevera durante unos 30 min.

Entretanto, preparamos la mayonesa de mostaza. Para ello, pondremos en la batidora, aceite de oliva, un huevo, el zumo de limón, el cebollino y la mostaza de Dijon. Lo batimos bien hasta que emulsione y nos quede una estupenda salsa.

Pasados los 30 min, retiraremos la masa de la nevera y preparamos las 4 hamburguesas,

Podemos modelar con las manos o utilizar un molde, como prefiráis

A continuación las pasamos por la plancha (o sartén) bien caliente con muy poco aceite y cuando ya estén bien hechas, las separamos en un plato

Abrimos los 4 panes de hamburguesa y los calentaremos en la misma la sartén

Cortaremos la cebolleta a pluma (se trata de un corte muy fino aprovechando la longitud de la cebolla, posiblemente lo hacéis siempre así pero no sabíais que se llamaba de esa manera).

Ya podemos montar la hamburguesa. ( aquí si no queréis poner el pan, siempre la podéis poner en el plato y así será más paleo, pero un día es un dia! )

Ponemos las hamburguesas en la base del pan, añadimos la mayonesa de mostaza, la cebolla, los brotes de berros y lo cubrimos con la otra parte del pan.

Y ya solo nos queda servirla y…. a disfrutar!!

Salmorejo de papaya

En realidad el salmorejo se hace con tomate, pero tenía excedente de papaya y se me ha ocurrido que podíamos substituir los tomates por papaya manteniendo el resto de ingredientes y, aunque le hubiera podido llamar crema fría de papaya, he decidido mantener también el nombre de salmorejo.

La verdad, es que el resultado es bastante bueno.

La papaya es una fruta tropical de gran tamaño originaria de México. Sus nutrientes son fundamentalmente azúcares de absorción rápida. El aporte de proteínas es bajo y su contenido en grasas es escaso.

Debido a su alto contenido en agua es un buen diurético, es rica en vitamina A y C, es un buen antioxidante y contiene minerales como el calcio, el magnesio, el potasio y el fósforo, que ayudan a restaurar el equilibrio ácido-base del organismo. Si a todo eso añadimos que está muy rica, ¿qué más queremos?

INGREDIENTES :

  • 300 gramos de papaya,
  • 1/2 vaso de aceite de oliva,
  • 100 gramos de virutas de jamón,
  • 100 ml de agua fría
  • 1/2 cucharita de vinagre,
  • 2 huevos cocidos,
  • Una rebanada de pan sin corteza (remojada en agua) opcional
  • sal y pimienta.

PREPARACIÓN

Pelaremos la papaya y le quitaremos las pepitas. Dependiendo de cómo esté de madura, esto lo podemos hacer con una cuchara.

Cortaremos la fruta en trozos y la pondremos en la trituradora junto con el aceite de oliva, el agua (un poco), el vinagre (en esta ocasión yo he puesto vinagre de mango que le queda genial, pero podéis usar cualquier otro), una pizca de sal y otra de pimienta.

Trituraremos hasta conseguir una crema. Si queremos darle algo más de consistencia podemos hacerlo añadiendo al triturar, unos trozos de miga de pan mojada y así se parecería más a la textura del salmorejo, pero probarlo primero sin el pan y ver la consistencia que os queda

Con eso ya tendríamos la base del salmorejo. Pero hay que darle algo de crunchy por lo que seguiremos utilizando la receta del salmorejo y picaremos finamente los huevos cocidos (supongo que cocer huevos lo tenéis claro, si no, me preguntáis) y las virutas de jamón.

Distribuimos el salmorejo en el recipiente que prefieras para emplatar y colocamos por encima un poco de huevo duro picado y un poco de jamón.

Incluso si lo queremos servir como aperitivo, se puede «emplatar» en vasos de chupito (en ese caso no añadiremos el pan)

Pues, de una manera u otra y ya sea de aperitivo o de primer plato, ya sabéis…A disfrutar!!

Gazpacho de calabacín

Empiezan los días de sol y empieza la temporada de los gazpachos. Aunque últimamente nos estamos volviendo un poco locos porque, de lo que era el típico gazpacho andaluz, hemos pasado a un montón de sopas frías que aunque se le sigue llamando gazpacho tienen poco que ver con el original.

De todas maneras, de alguna manera había que llamarlas. Pues vale, las llamaremos gazpacho ya tengan frutas u hortalizas, qué más da!!

Ya en este blog os he puesto varias recetas de gazpacho, desde el típico gazpacho pasando por el gazpacho de sandía o el gazpacho de fresas. Todos ellos muy buenos y refrescantes. Pero en esta ocasión, os pongo uno diferente, que por ser diferente, incluso es diferente en color, ya que los otros son más o menos rojos y este tiende más a verde.

Ingredientes para 4 personas

  • 4 calabacines medianos,
  • medio pimiento verde,
  • media cebolla,
  • medio pepino,
  • un diente de ajo,
  • tres rebanadas de pan sin la corteza,
  • 2 hojas de albahaca fresca,
  • Un vaso de agua fría y hielo
  • vinagre,
  • aceite de oliva virgen extra,
  • sal,

Para la guarnición :

  • dos huevos duros
  • tomates cherry

PREPARACIÓN:

primero, pondremos en remojo el pan con un poco de vinagre.

Ahora, lavaremos bien las verduras y las iremos troceando. Pondremos el calabacín, sin pelarlo en el vaso de la batidora junto con el pimiento, la cebolla, el pepino, el diente de ajo y las hojas de albahaca fresca.

Precisamente, vuelvo a recomendar, como ya he hecho en otras ocasiones, que tengáis un pequeño huerto urbano en el que poder cultivar vuestras plantas para cocinar. La albahaca estará mucho más buena si la recogemos de nuestra pequeña plantación.

Añadimos el pan y un poco de agua y batimos hasta tener una crema bien fina.

Ponemos un chorrito de aceite y un poco de sal, y seguimos triturando. Si vemos que queda muy espeso añadimos un poquito más de agua.

Probamos un poco y, de ser necesario, rectificaremos de sal, aceite o vinagre.

Si la intención es servirlo al momento podemos echar un poco de hielo y batirlo un poco más. Si por el contrario, es para luego, lo pondremos en la nevera a enfriar.

Mientras se estaba triturando, o posteriormente, haremos un par de huevos duros por el método que prefiráis. Cortaremos los tomatitos en rodajas y trocearemos los huevos duros, todo esto nos servirá de guarnición.

Serviremos el gazpacho con un poco de la guarnición por encima y acabaremos poniendo un chorreoncito de aceite.

Recordad que se ha de servir bien frío. Y ya solo nos queda coger una cuchara y….a disfrutar!!

“Libritos” de presa ibérica con queso azul

Os pongo una exquisita receta de libritos. Los llamamos libritos por que es la carne abierta como si fuera un libro, rellena y luego vuelta a cerrar.

Los libritos, son el típico plato de toda la vida en casa, el que nos hacía hacia nuestra madre o nuestra abuela. Pero, aunque plato típico, también podemos realzarlo sin muchos problemas.

Habitualmente los libritos se hacen de lomo, pero en esta ocasión, los haremos más sofisticados y utilizaremos presa ibérica.

La presa ibérica es el corte del cerdo ibérico de más calidad, se encuentra entre la paleta y el cabecero del lomo y de cada cerdo se obtienen dos piezas de presa  de unos 500 gr aproximadamente. Se aprecia en ella un veteado debido a la infiltracion de grasas, lo que la hace muy jugosa y sabrosa.

INGREDIENTES

  • 8 escalopes de presa ibérica que, previamente habremos pedido a nuestra carnicera que nos los abra por la mitad
  • 70 g de queso azul, tipo Roquefort o similar
  • 50 g de mozzarella de búfala
  • 60 g de virutas de jamón de bellota
  • sal y pimienta
  • 300 g de pan seco
  • 120 g de avellanas tostadas
  • 2 huevos
  • harina
  • aceite

PREPARACIÓN

Cortamos en láminas 50 g de mozzarella y desmenuzaremos 70 g de queso azul.

Estiramos los escalopes de presa ibérica con el rodillo poniendo papel sulfurizado encima, esto es opcional, pero luego para cerrarlos va mejor.

Salpimentamos, un poco, los escalopes y los rellenamos con 60 g de virutas de jamón de bellota y los quesos.

cerramos los libritos. Si no se cierran bien, siempre podéis ayudaros de un palillo mondadientes. Pero acordaros de sacarlo antes de servir

Cortamos 300 g de pan de barra seco en daditos y los freímos en una sartén con aceite. Cuando lo saquemos escurrimos el aceite.

Ponemos en la picadora el pan frito y 120 g de avellanas. Lo trituramos (Tampoco hay que triturarlo excesivamente fino, porque nos interesa que quede algún trocito para que haga «crunch» ) y lo ponemos en un plato para rebozar.

Ponemos a calentar una sartén con aceite.

ahora montaremos «la parada» para rebozar.

Batimos 2 huevos y los ponemos en un plato. Llenamos otro plato con harina.

Pasamos los libritos por harina, luego por el huevo batido y, finalmente, por el pan con avellana.

Pasarlo por harina, significa poner en harina pero justo para que quede seco, no nos interesa poner cantidades de harina. Cuando lo tengamos enharinado daremos unos golpecitos para quitar la sobrante.

Los iremos friendo en pequeñas cantidades y los dejamos en una bandeja con papel absorbente para evitar el aceite sobrante.

Ahora simplemente, tendremos que emplatar y servir. Podemos acompañarlos con una salsa tártara y un poco de ensalada. Pero eso ya va a gustos.

En cualquier caso, ya sabéis… A disfrutar!!

Blinis paleo

Con sardinas en aceite
Aunque comas paleo y el pan no esté dentro de los alimentos incluidos en este tipo de dieta, a veces te apetece alguna cosa que queda muy bien con pan. Bueno, pues eso no es problema. Hoy os voy a enseñar a hacer «blinis» pero según la «filosofía» paleo. 

En realidad no es un blini ya que, un blini es una tortita fina (especie de crêpe) de origen principalmente eslavo a base de harina, huevos, leche y levadura que puede comerse cocida en el horno o frita, con o sin relleno alguno.  Y este que yo os voy a enseñar tiene un parecido razonable pero es más «paleo» ya que la harina es de coco y no lleva leche. Pero algún nombre le tenía que dar. 
INGREDIENTES:(para unos 10 blinis)

  • 4 huevos 
  • 1/4 de taza de aceite de coco
  • 1/2 taza de harina de coco
  • 1/4 cucharadita de polvo de hornear (bicarbonato)
  • 1/2 taza de leche de coco o agua mineral
  • 2 pizcas de sal

PREPARACIÓN 

Mezclaremos todo junto (excepto el componente líquido (sea agua o leche de coco) hasta que esté espeso pero maleable.  Luego añadiremos el agua o la leche de coco y continuaremos removiendo hasta que esté como una masa fluida. 

Pondremos aceite en una sartén a fuego medio, y luego cogeremos la mezcla con una cuchara e iremos depositándola en la sartén de una en una, dejando que se haga y dándoles la vuelta cuando estén hechas por un lado. 


Una vez las tengamos hechas, podemos utilizarlas así tal como van o como base para ponerle alguna cosa que nos guste encima. 

Con jamón serrano

Puedes hacerlos más grandes o pequeños, incluso minis a modo de canapés de bocado, para servirlos con dulce o salado, como más te guste.

Con cangrejo, tomate cherry y salsa rosa

Con fresas, crema de coco y jarabe de arce

Bien, pues, elijáis lo que elijáis para poner por encima en cualquier caso, a disfrutar!!

Pretzel

 Ya os dije que os pondría platos típicos de Austria bien, pues uno de los que más se ven en todos los rincones, de todos los mercados de Navidad son los pretzel. Esos lazos de pan salados que son típicos no sólo de Austria si no también de Alemania. Dicen que son de origen celta y se hacían para celebrar el inicio de la primavera, y que su característica forma representaría los cuernos de Aries. Los romanos los llamaron panis tordus y los monjes benedictinos los entregaban como premio a los niños aplicados. Los católicos del sur de Alemania los usaban para adornar las palmas el Domingo de Ramos. Y nosotros nos los comemos cuando podemos, porque, están muy ricos.

Esta receta que es muy fácil de hacer, de momento no es paleo, porque lo he hecho con harina normal ya que quería la receta original que comí en Viena. Cuando pueda cambiar los ingredientes para hacerla paleo os la pasaré, pero de momento recordar que estamos en Navidad y un caprichito siempre nos podemos dar.

Receta para unos cuantos Pretzels: Y digo unos cuantos porque, como los pretzel se pueden hacer del tamaño que uno quiera depende de vosotros utilizar la masa que os salga y a partir de ahí ir haciendo más o menos, dependiendo que sean más grandes o más pequeños (De todas maneras si los hacéis pequeños da para unos 12)

INGREDIENTES.

  • 3 tazas de harina de trigo (Más adelante la sustituiré por otro tipo de harina)
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 cucharada de azúcar
  • 1 taza de agua mineral templada
  • 1 cucharada de levadura de panadería
  • Unos 50 g de mantequilla (derretida)
  • 1 yema de huevo
  • Sal gorda (Tipo Maldon)

PREPARACION :

En un bol grande, mezclamos los ingredientes secos (harina, sal, azúcar y levadura). Hacemos el típico volcán con la harina y agregamos el agua templada y la mantequilla derretida y amasamos durante unos 5 minutos. Cuando la masa adquiera una textura elástica, qué no se pegue a las paredes del bol, hacemos una bola y la envolvemos en un trapo limpio y la dejamos reposar unos quince minutos en un sitio fresco, por ejemplo la nevera.

Pasado ese tiempo cogemos la masa y la dividimos en tantas partes como pretzel queramos hacer. Cogemos cada trozo de masa y empezamos a darle forma con las manos para hacer una bola. Cuando tengamos la bola, la ponemos encima de la superficie de trabajo y vamos haciéndola rodar extendiendo las manos hacia fuera hasta conseguir un cordón de pasta.  Mientras precalentáis el horno a 200°C.


Cuando los tengamos hechos, los colocamos en la bandeja del horno o en más de una dependiendo si os caben, o no. Es aconsejable que en estas bandejas pongáis papel de hornear para que no se enganchen. Si preferís podeis utilizar solo las bandejas previamente untadas de aceite. Cuando los tengáis en las bandejas, cubrid los pretzels nuevamente con un trapo limpio. Dejadlos reposar en un lugar fresco unos 30 minutos o hasta que la hayan crecido el doble.

Finalmente, untamos la parte superior de los pretzels para darles un toque brillante con una mezcla de yema de huevo y una cucharada de agua y espolvoreadlos con la sal gorda.

Colocad las bandejas en la parte central del horno y cocedlos durante 20 minutos (depende del horno) o hasta que estén doraditos. Dejadlos enfriar durante 15 minutos antes de servir y listos, ya tenéis vuestros Pretzel!!

como podeis ver, los hay de todos los tamaños. De cualquier forma, hacedlos y disfrutar!!

Pan de platano

Hola, hoy he pasado por delante de una frutería y tenían de oferta una bandeja con un montón de plátanos a sólo un euro, y me dicho esta es mi oportunidad !!

La oferta se debía a que los plátanos no estaban en su mejor momento sino que ya llevaban algún día en la frutería pero a mí eso me era igual porque precisamente los quería que estuvieran un poquito pasados (hubieran estado mejor un poco más pasados, pero me guardo el resto para el próximo)

Así que, con una bandeja de plátanos pasados he decidido que iba a hacer un pan de plátano. Hay un montón de recetas de pan de plátano pero, la verdad, hay muchas que son complicadas pero los que ya me conocéis sabéis que, por qué complicarse cuando podemos hacer las cosas fáciles. Y fácil es la receta que os voy a enseñar y el resultado es impresionante. Y lo mejor es que no ensuciaremos nada, sólo la batidora y un molde y con  10min  de preparación y 45 minutos de cocción ya lo tendremos hecho. Cuidado porque aunque no lleva azúcar, la miel si que tiene y si sois de los que vigiláis, ojo. 

INGREDIENTES 

  • 4 huevos
  • Dos cucharadas colmadas de miel  (o una de miel y otra de jarabe de arce)
  • 90 gramos de mantequilla, derretida en pomada (o aceite de coco(más sano))
  • 4 plátanos maduros
  • 2 tazas de harina de arroz (o si preferís harina integral)
  • 2 cucharaditas de bicarbonato
  • Nueces

 PREPARACION

Precalentaremos el horno a 180º C  y engrasaremos un molde con mantequilla para que no se nos pegue (yo he utilizado uno redondo, pero podéis usarlo de otra forma)

Pondremos los huevos y la miel en el vaso de la trituradora y batiremos hasta que se esponjen. Agregaremos al vaso la mantequilla, los plátanos cortados, la harina y el bicarbonato; licúa de nuevo hasta obtener una mezcla uniforme.

Mientras tanto cogemos un puñado de nueces y las envolvemos en papel de aluminio y las machacanos y las ponemos en el horno. 

Vertemos la mezcla dentro del molde engrasado y retiramos las nueces del horno y la vertemos sobre la mezcla. 

Horneamos hasta que el pan se haya cocido y la supeficie se vea dorada, aproximadamente 45 minutos.
Introducimos un cuchillo o un palillo y si sale seco ya está. Al sacarlo podéis poner otras nueces enteras por encima.  

De este pastel salen unas 12 porciones que podréis utilizar para desayunar o como merienda o postre y así, ya sabéis.  A disfrutar!!

Porra antequerana

Hoy aprovechando que ya se acabado el verano voy a poner una receta precisamente de verano para así despedir como Dios manda a esa estación que tantos calores nos ha dado. Basándome en una receta de mi compañero bloguero momentos con sabor en la que nos recomendaba un salmorejo me acordé de un plato muy parecido que hacemos en casa de mi madre.

Pero curiosamente no os hablaré del salmorejo. Aunque habitualmente todo el mundo llama salmorejo a esta comida o a una muy similar,  en casa siempre la hemos llamado porra, ¿porqué?, pues no se, pero así ha sido siempre. Concretamente se trata de la Porra Antequerana, que en principio es muy similar al salmorejo pero con alguna variación. El Salmorejo es un plato típicamente cordobés, sin embargo la Porra es un plato Malagueño y tienen muy pocas diferencias (a no ser que pongas a discutirlo a un malagueño y un cordobés jeje)

La diferencia principal, por poner alguna, es que la Porra lleva los mismos ingredientes que el Salmorejo, pero también lleva un pimiento verde y quizás un poco más de pan (es por ese pan por lo que no es una receta paleo, pero ya sabéis, tampoco hay que ser estrictos). El salmorejo se suele acompañar de huevo y jamón, y la Porra también (parece un chiste de Eugenio) aunque también la he visto acompañada con atún y huevo duro, aunque yo lo suelo acompañar con huevo y jamón.

INGREDIENTES 

  • 1 k. de tomates maduros. 
  • 1 pimiento verde
  • 250 g de miga blanca de pan del día anterior
  • medio diente de ajo (le sacamos el germen para que no se repita)
  • aceite de oliva virgen
  • un chorrito de vinagre
  • 1 pizca de sal

Para acompañar

  • Jamón ibérico picado
  • huevo duro picado.

PREPARACION

Lavamos y pelamos los tomates y los cortamos en cuatro y luego los metemos en el vaso de la trituradora. Lo mismo hacemos con el pimiento y luego ponemos el resto de los ingredientes en la batidora menos el pan. Trituramos hasta que quede liquido y luego añadimos el pan que habremos cortado en trozos pequeños para que quepan en la batidora. Seguimos triturando hasta que quede cremosa y ya lo tendremos. A continuación lo ponemos en la nevera y a la hora de servir lo acompañamos de tacos de jamón pequeños y los huevos duros también cortados en cuadraditos.

Se puede comer con cuchara, pero si os volveis locos y pasais de dietas y esas cosas, probar a comerlo utilizando trozos de pan ya veréis como no tiene nombre.

y ahora como siempre, a disfrutar!!