En realidad el salmorejo se hace con tomate, pero tenía excedente de papaya y se me ha ocurrido que podíamos substituir los tomates por papaya manteniendo el resto de ingredientes y, aunque le hubiera podido llamar crema fría de papaya, he decidido mantener también el nombre de salmorejo.
La verdad, es que el resultado es bastante bueno.
La papaya es una fruta tropical de gran tamaño originaria de México. Sus nutrientes son fundamentalmente azúcares de absorción rápida. El aporte de proteínas es bajo y su contenido en grasas es escaso.
Debido a su alto contenido en agua es un buen diurético, es rica en vitamina A y C, es un buen antioxidante y contiene minerales como el calcio, el magnesio, el potasio y el fósforo, que ayudan a restaurar el equilibrio ácido-base del organismo. Si a todo eso añadimos que está muy rica, ¿qué más queremos?
INGREDIENTES :
- 300 gramos de papaya,
- 1/2 vaso de aceite de oliva,
- 100 gramos de virutas de jamón,
- 100 ml de agua fría
- 1/2 cucharita de vinagre,
- 2 huevos cocidos,
- Una rebanada de pan sin corteza (remojada en agua) opcional
- sal y pimienta.
PREPARACIÓN
Pelaremos la papaya y le quitaremos las pepitas. Dependiendo de cómo esté de madura, esto lo podemos hacer con una cuchara.
Cortaremos la fruta en trozos y la pondremos en la trituradora junto con el aceite de oliva, el agua (un poco), el vinagre (en esta ocasión yo he puesto vinagre de mango que le queda genial, pero podéis usar cualquier otro), una pizca de sal y otra de pimienta.
Trituraremos hasta conseguir una crema. Si queremos darle algo más de consistencia podemos hacerlo añadiendo al triturar, unos trozos de miga de pan mojada y así se parecería más a la textura del salmorejo, pero probarlo primero sin el pan y ver la consistencia que os queda
Con eso ya tendríamos la base del salmorejo. Pero hay que darle algo de crunchy por lo que seguiremos utilizando la receta del salmorejo y picaremos finamente los huevos cocidos (supongo que cocer huevos lo tenéis claro, si no, me preguntáis) y las virutas de jamón.
Distribuimos el salmorejo en el recipiente que prefieras para emplatar y colocamos por encima un poco de huevo duro picado y un poco de jamón.
Incluso si lo queremos servir como aperitivo, se puede «emplatar» en vasos de chupito (en ese caso no añadiremos el pan)
Pues, de una manera u otra y ya sea de aperitivo o de primer plato, ya sabéis…A disfrutar!!